La verdad detrás del café descafeïnado ¿es bueno tomarlo?

¿Qué es el café descafeinado y cuáles son sus procesos?

El café descafeinado ha ganado popularidad en los últimos años, especialmente entre aquellos que aman el sabor del café pero prefieren evitar la cafeína por diversas razones. Pero, ¿qué es exactamente el café descafeinado y cómo se logra eliminar la cafeína sin perder su característico sabor? En este artículo, exploraremos qué es el café descafeinado, los diferentes procesos para descafeinarlo y por qué el método de lavado con agua es considerado el mejor.

¿Qué es el café descafeinado?

El café descafeinado es aquel del cual se ha eliminado al menos el 97% de la cafeína. A pesar de este proceso, el café descafeinado mantiene la mayoría de sus propiedades organolépticas, es decir, su sabor y aroma característicos. Esto lo hace una opción ideal para aquellos que desean disfrutar de una taza de café sin los efectos estimulantes de la cafeína.

Procesos de descafeinación del café

Existen varios métodos para eliminar la cafeína de los granos de café, y cada uno tiene sus propias ventajas y desventajas. A continuación, detallamos los más comunes:

1. Proceso de disolventes químicos: Este método utiliza disolventes químicos como el cloruro de metileno o el acetato de etilo para eliminar la cafeína. Los granos de café se remojan en el disolvente, que se une a la cafeína y luego se extrae del grano. Posteriormente, los granos se enjuagan para eliminar los restos de disolvente. Aunque es efectivo y económico, algunos consumidores prefieren evitar este método debido al uso de productos químicos. Es el proceso que se usa en el café en cápsulas y la mayoría de cafés comerciales.
2. Proceso de dióxido de carbono (CO2): En este método, los granos de café se humedecen y se colocan en un recipiente de extracción donde se aplica CO2 en estado supercrítico. El CO2 actúa como un disolvente natural, extrayendo la cafeína sin afectar los componentes del sabor. Este método es considerado más seguro y natural que el uso de disolventes químicos, aunque es más costoso.
3. Proceso de Swiss Water: El proceso de Swiss Water es un método totalmente natural que utiliza solo agua para eliminar la cafeína. En este proceso, los granos de café se sumergen en agua caliente, lo que permite que la cafeína y otros solubles se disuelvan. El agua saturada con compuestos de café, pero sin cafeína, se filtra a través de un filtro de carbón activado que atrapa la cafeína. Luego, esta agua libre de cafeína se utiliza para remojar más granos de café, repitiendo el ciclo hasta que se elimina la cafeína.
4. Proceso de Mountain Water: Similar al método Swiss Water, el proceso de Mountain Water utiliza agua pura de glaciares del Pico Orizaba en México. Los granos de café se sumergen en esta agua pura, donde la cafeína se disuelve y se filtra a través de un filtro de carbón activado. Este método es apreciado por su uso de agua de alta calidad y su enfoque natural.

¿Cuál es el mejor método?

De todos los métodos mencionados, el proceso de lavado con agua (ya sea Swiss Water o Mountain Water) se destaca como el mejor por varias razones. En primer lugar, es un método completamente natural que no utiliza disolventes químicos, lo que lo hace seguro para la salud y el medio ambiente. Además, este proceso conserva mejor los sabores y aromas del café, lo que resulta en una taza de café más rica y auténtica.

El proceso de lavado con agua asegura que los granos de café mantengan sus características originales, permitiendo a los amantes del café disfrutar de su bebida favorita sin comprometer el sabor ni los efectos negativos de la cafeína. Por estas razones, muchos consideran que el mejor café descafeinado es aquel que se obtiene mediante procesos naturales como el lavado con agua.

En conclusión, el café descafeinado ofrece una excelente alternativa para quienes desean reducir su consumo de cafeína sin renunciar al placer de una buena taza de café. Entre los diversos métodos de descafeinación, los procesos de lavado con agua son los más recomendados por su enfoque natural y su capacidad para preservar la calidad del café. Así, los consumidores pueden disfrutar de un café delicioso y saludable, libre de cafeína y de productos químicos no deseados.